
Una vez más nuestra mirada recae en la montaña mágica de s’Alcadena. Esta vez toca escuchar la voz de las personas que han atendido su llamada y que decidieron participar en las salidas que se organizaron en Rutas Mágicas. Son mujeres y de forma voluntaria nos ofrecen un testimonio enriquecedor y emotivo sobre su encuentro con s’Alcadena. Les hemos pedido que nos relaten qué las llevó a atender su llamada, cómo vivieron su encuentro el día de la salida y de qué manera están integrando la experiencia en sus vidas. Hay que decir que ‘casualmente’ todas ellas proceden de lugares distintos del planeta y la Vida las trajo a todas hace años a la isla de Mallorca. ¿Habrá sido s’Alcadena la responsable?
Transcripción del episodio
[00:00:00] Speaker A: Mi cuerpo de alguna manera se deshizo.
[00:00:04] Speaker B: Observamos y percibimos también mucha energía, energía que no se puede ver con estos ojos.
[00:00:11] Speaker C: No tengo otra palabra para describir esto, un corazón con mucha calma, algo muy amoroso, muy cariñoso.
[00:00:21] Speaker D: Era simplemente, me tocaba todas mis células.
Fibraba tanto con la información que me llegaba.
[00:00:31] Speaker E: Y me temblaba tanto el corazón que no podía parar de llorar.
[00:00:37] Speaker F: Es difícil de explicar en palabras.
Mágico desde el primer momento.
[00:00:45] Speaker G: Muy buenos días. Un saludo a todo el mundo. Gracias por estar aquí en la cabaña del bosque.
Hoy tenemos un episodio más dedicado a la montaña de Salcadena.
Pero esta vez la voz la van a poner las personas que han estado recientemente junto a ella.
Se trata de personas que hemos acompañado en grupos organizados y que se han ofrecido voluntarias para hacer el testimonio de lo que ha sido para ellas esa vivencia. Para nosotros es un placer tener la oportunidad de acompañar a estas personas en las salidas que organizamos.
Lo que hacemos es llevarles realmente a un viaje interior que sucede a lo largo de una excursión.
En esta ocasión, en la montaña de Salcadena, nos acercamos al sagrado femenino, a la exploración de lo que eso implica para nosotros y cómo nos puede llegar, de qué manera podemos respirarlo, teniendo siempre como referencia el arquetipo de María Magdalena.
No podemos obviar que esa montaña respira esa energía porque nos ha acompañado cada vez que nosotros hemos llegado hasta ahí.
Se trata de testimonios muy enriquecedores y hablados desde el corazón. Eso lo vais a poder sentir desde el primer momento.
En algunos casos la gente se emociona y de forma conmovedora nos están exponiendo su vivencia personal y la forma en la que les ha tocado.
Ante todo quiero dar las gracias de corazón a todas estas personas que voluntariamente nos han hecho llegar su testimonio.
Algunas de ellas nos lo han hecho llegar en persona, incluso viniendo hasta la cabaña del bosque, con lo cual ha sido muy agradable tenerlas de nuevo en compañía. Y, por supuesto, todas las demás que han dedicado el tiempo para tomar la reflexión y poco a poco pensar qué es lo que querían compartir, se notaba que hacían un testimonio de corazón, realmente buscando expresar lo que han vivido y lo que han sentido.
Y ya sin más, demos paso a escuchar los testimonios, la voz de las personas que han vivido Salcadena.
[00:02:50] Speaker A: Bueno, a mí me habían contado, yo sabía que…
me habían contado que María Magdalena estuvo en esta montaña.
Y me llegó en un momento también muy oportuno, fue como muy fácil.
Como un llamado a decir, ostras, yo quiero estar ahí, ¿no? Yo ya conocía de este arquetipo femenino.
No tenía expectativas en el sentido, no sé si me abro a lo que sea, pero yo quiero estar ahí, quiero sentirla.
Para mí fue una energía que me atravesaba, más allá de, como he dicho, más allá de la mente.
Tuve que rendir a algo más grande que yo, Mi cuerpo de alguna manera se deshizo.
Empecé a llorar, empecé a llorar como si fuera sostenida por…
por una madre, por la madre naturaleza, por María Magdalena, por algo más grande que yo, que me sostenía.
Y como tener la certeza de que el camino que estaba escogiendo hace tiempo que siento que me quiero dedicar a las mujeres, que quiero acompañarlas, que quiero… Y como algo que me decía que sí, que es por ahí, que yo estoy aquí contigo, que yo te sostengo, que no tienes que…
que temer, que no tienes que tener miedo.
Y eso fue lo que me atravesó, fue como rendirme a mi ego.
Bueno, también experimentar por primera vez en mi vida un bautizo, como un renacimiento por las aguas de esta montaña, también fue para mí una sensación de decir, nazco de nuevo, o sea, renazco a esa nueva yo.
Como que necesitas tiempo para para integrar, para ver cómo eso se va incorporando, se va integrando en tu vida y cómo vas viendo que hay cosas que se van a terminar y cosas que van a seguir o que vas a decir, o sea, cómo vas a coger con más fuerza y vas a decir que sí, que es por aquí, que ya me lo ha dicho la madre, que ya…
Aún sigo integrando, pero convencida. O sea, hay como un sí muy interno de un camino más alineado a mí, ¿no? Como que he vuelto otra vez al camino.
Y sobre todo sentir que estoy sostenida, que no tengo que tener miedo y que si me caigo, que no caeré porque volveré al camino. O sea, como la confianza de.
[00:05:31] Speaker F: En.
[00:05:31] Speaker A: La vida, en mí y en mi corazón. Y eso es que no tiene precio, es como muy muy grande, algo muy grande y realmente como un regalo. Yo me doy cuenta de la sensación esa de no correr tanto a la hora de tomar decisiones. Bueno, de seguir el tiempo del corazón y de no bajar más al corazón, de no estar tanto en la mente y de ir relajado, tomando también distancia de las cosas, más escucha interna.
Diría a todas las personas que mínimamente le resuene nuestro sentir o nuestra experiencia.
[00:06:18] Speaker G: Que.
[00:06:20] Speaker A: Si sienten el llamado o se sienten atraídas por esta experiencia, que no se lo piensen y que vayan. Y nada, y que será un punto de inflexión en sus vidas. Y eso. Y nada, muchas gracias.
Para mí fue.
[00:06:41] Speaker C: Un llamado también, pero ya había sentido la presencia de María Magdalena en mi vida, más al nivel energético, más al nivel del cuerpo, con un libro que se llama «Moi, Marie Amé», un libro solamente en francés.
Leyendo este libro, durante el principio del año, me di cuenta que tenía esta sensación de estar en un vórtex, en diferentes sitios.
Donde me llevaba el libro, me seguía esta presencia.
Me interesaba ir a un sitio donde podía sentir de nuevo esta energía, pero tal vez sentirlo más fuerte. Con un grupo, con alguien que nos guía, para integrarlo, para que esta cosa que sentía daba más sentido y para juntarme con personas con quien estas personas estaban también conectadas.
No sabía tampoco qué iba a pasar, no tenía expectativa.
Porque mi manera de conectar con el invisible es a través de mi cuerpo. Tengo que ir a los lugares para cargar, para integrar. Sí que antes de ir a Salcadena fui un día al Push de Maya Magdalena. Un día como un lunes no había nadie.
Y me quedé en la capilla dos horas, algo así, rezando, hablando, teniendo como un diálogo.
Y la energía era como súper fuerte.
Realmente sentía como esta energía en mi espalda, todo mi alrededor en mi espalda. Cuando escucho esta pregunta tengo la imagen de la montaña de lejos y con esta figura en la mano. Lo que me vino es como una sensación de alas. Entonces me estaba presentando y tenía la impresión de ser como un pájaro, que sea un colibrí. Pero sentí algo muy ligero, muy bonito, muy abierto, muy ligero. Y la sensación fue algo muy acogedor, con estas curvas, muy redondo, muy femenino.
Y mi sensación era como la madre, como realmente una madre que nos acoge y una sensación de paz, de mucha, mucha, mucha paz. que se puede olvidar todo lo que hay alrededor, aquí estamos, aquí estoy, estamos bienvenidos. No tengo otra palabra para describir esto, un corazón con mucha calma, algo muy amoroso, muy cariñoso, y me sentía como, no como un bebé, pero como una niña. Esa sensación de paz me ha dado mucha certeza, mucha confianza en mi vida, en mi presencia en esta tierra, en esta época, en estos momentos, en este año, que aquí estoy para algo y esto.
Decía a la compañera, hay muchas cosas en común de de confiar y de soltar y de continuar. Y me siento sostenida y sé que no voy a tener ningún problema.
Es este sentimiento de paz con la vida misma.
Eso es.
Todo está divino, lo sé, pero lo sé, lo sabía y ya lo he experimentado, pero siempre vuelven las dudas.
Y ahora creo que hay algo que se ha integrado a otro nivel de confianza.
Sí, lo que me viene es de escuchar el llamado cuando hay uno, que sea para subir las cadenas o para otros tipos de llamados. Yo creo que la conexión con sí mismo, el conocimiento de sí mismo y escuchar realmente lo que el cuerpo pide, el corazón pide, el alma pide, Para vivir experiencias es lo más mágico en la vida. Y sentir quiénes son las buenas personas para guiar. Eso es lo que me viene.
[00:10:48] Speaker B: Quería compartir contigo mis sensaciones con respecto a la excursión de Sal Cadena.
Me motivó a ir que bueno por circunstancias ya habíamos querido hacer esta excursión y bueno apareciste tú en el camino y nos nos llevaste y creo que fuiste la persona más acertada para guiarnos en esa excursión donde observamos y percibimos también mucha energía energía que no se.
[00:11:23] Speaker F: Puede ver con estos ojos me pareció.
[00:11:27] Speaker B: Una excursión muy muy bonita muy hermoso la forma en cómo nos llevaste la historia que nos contaste durante todo el camino sensaciones percepciones que podíamos observar en la naturaleza Esto me pareció hermoso, la forma en como tú manejas la excursión, es una parte muy consciente, muy conectado con la naturaleza y nos ayudó también a nosotros a ir en ese sentido de conexión y de observar también todo lo que estábamos percibiendo a nuestro alrededor.
y luego después de la excursión te quedas con una sensación de paz con una sensación de recordar aquello que ya hemos olvidado y para mí pues fue muy muy bonito y bueno agradecerte Luis por este encuentro tan sanador y tan maravilloso que nos permitiste dar, tener en este día así que muchísimas gracias.
[00:12:40] Speaker D: Bueno, la visita a Celcadena, fuimos un grupo que ya se formó anteriormente a la visita de la masculina, entonces para mí fue importante tener un grupo en donde podíamos trabajar más profundo.
Tenía mucha necesidad al principio de silencio, de silencio y conectarme conmigo misma y con la naturaleza para luego desde ahí sentir la magia.
Había un momento que me acuerdo que estamos descansando creo y nos encontramos con una mariposa que estaba descansando y estaba ahí tomando el sol y de repente pues vino otra mariposa e hicieron ahí un baile.
El mensaje era continuamente la unificación, la unión entre el sagrado masculino y femenino. Nos encontramos pues también con una pequeña cueva y ahí fue muy potente para mí el escuchar a Luis contando su conexión o su encuentro con la montaña y con María Magdalena y la información que le llevó.
El tema de María Magdalena siempre ha estado muy presente desde hace muchos años en mi vida, entonces ahí yo me llegó mucha emoción, no te puedo decir si era alegría, si era…
era simplemente me tocaba todas mis células.
Fibraba tanto con la información que me llegaba y… y me salían muchas lágrimas.
Y cuando llegaba, cuando luego entraba en la pequeña gruta, pues era…
me sentía acogida, muy acogida.
y como una paz y una serenidad porque ahí pues realmente me podría entregar y recibir.
Y después que salí de esta pequeña cueva, subí yo sola más hacia arriba, subí, subí, subí y luego me senté y era como en la ventana hacia hacia el cielo y me sentaba ahí y digo aquí me quedo porque se paraba el tiempo se paraba el tiempo y desde simplemente podía salir de una realidad y entrar en el en el no tiempo y no incluso no espacio me encantó me encontró la la excursión era una invitación enormemente grande de de ir conectando cada vez más desde la apretura y recibir.
La montaña me invitaba mucho a recibir, a seguir mi intuición y desde la apretura y el recibir encontrar los mensajes.
el camino, cuál es el siguiente paso que seguir y bajar de la mente al cuerpo, corazón y apertura.
Y bueno, la tercera parte es referente a la integración. A partir de ahí mi vida entró en mucha velocidad por ir integrando esa energía femenina.
De estar en la vida con la entrega y en la unificación, ¿no?
cuando tomo dirección y directividad y cuando me entrego y recibo.
Pero el tema era siempre el mismo, poder encarnar realmente esa energía.
Estoy con más serenidad y para mí, bueno, María Magdalena de repente me aparece por todos lados y creo que aunque ya estaba muy en este camino, pues Se ha profundizado todo este tema.
Gracias, gracias, gracias por la propuesta.
Muy recomendable.
Un abrazo muy grande.
[00:17:07] Speaker E: Hola, mi nombre es Romina. Sentí un fuerte llamado a hacerme sacerdotisa celta y dentro de esta formación conocí las enseñanzas y el camino de María Magdalena. Siempre quise ir a esta montaña pero todo el mundo me decía que no podía llegar porque era muy difícil y la gente se perdía por el camino, que necesitábamos un guía especial.
Luego de quedar con Luis en una fecha, el grupo se formó rápidamente y comenzamos cada uno de nosotros a tener diferentes señales de que estábamos en el camino correcto y estábamos súper ilusionados.
La noche anterior o dos noches anteriores, Tuve una sensación, una visión, un sueño en el que la montaña me decía, desnúdate, deja tu ego, deja lo que tienes que dejar abajo para poder subir.
Y enseguida que entramos mi corazón comenzó a vibrar, mi cuerpo estaba muy nervioso, no entendía qué me pasaba y yo veía a Jesús vestido de blanco Y me temblaba tanto el corazón que no podía parar de llorar. Estaba súper emocionada.
Y al rato vi como María Magdalena se aproximaba junto a Jesús.
Y más tarde vi un círculo de doce personas, todas de blanco. Y me decía, somos el círculo de los doce ancianos.
Nos atuvimos frente a una piedra grande y yo veía a Jesús sentado ahí.
Como que nos estaba esperando, guiando, vigilando, protegiendo.
Se formó un círculo de cantos armónicos, de energía, fue como subió la vibración, el círculo se…
Se hizo mágico, fue pura magia lo que surgió ahí en ese momento.
Un camino muy mágico, como si estuviéramos entrando en el cielo, en otra dimensión, una experiencia a otro nivel.
Algo que no se puede explicar, que hay que experimentarlo, que hay que vivirlo.
[00:19:43] Speaker F: Antes de ir a esa maravillosa montaña, realmente no conocía nada de ese hermoso lugar.
Siempre fue para mí mágica verla desde algunos puntos de la isla.
Siempre sentí que tenía algo muy, muy especial desde la total ignorancia que podría haber allí, ¿no? Pero sí siempre sentí que había algo allí, en esas dos hermosas montañas de Alaró.
Este año ha pasado algo muy mágico con esa montaña. Tuve un llamado de ella.
Una amiga tenía esa búsqueda, digamos, de poder subir a la montaña Salcadena. Llevaba un tiempo. Ella está haciendo algo con el camino de María Magdalena.
Y bueno, me lo compartió conmigo que llevaba un tiempo buscando un guía.
y no lo encontraba. Llevaba unos años, de hecho.
Y varias compañeras o amigas intentaron ir a Salcadena y no pudieron con éxito llegar a donde querían. Siempre había algo que o se perdían o algo no les dejaba.
Un día estaba pasando por la carretera y vi a Salcadena, hermosa, deslumbrante, con el sol iluminándola.
y me vino a la mente con un mensaje con una gran certeza que tenía que ayudar a mi amiga la manera de ir a la montaña la manera en que se desenvolvieron las las cosas fue maravilloso porque encontré un guía simplemente comentándolo entre amigas en una semana o dos ya lo habíamos encontrado que fue Luis yo no entendía muy bien todo lo que pasaba porque realmente yo.
[00:21:38] Speaker C: No.
[00:21:41] Speaker F: No sabía nada de esa cadena, simplemente era esa atracción que tenía desde hace muchos años, desde que estoy en la isla.
Así que bueno, no tenía ninguna expectativa, pero sí que un poco de emoción y de todo, porque no había recibido yo nunca un mensaje así tan claro y no sabía qué pasaba.
Así que bueno, la preparación fue simplemente estar atenta a las señales.
Una de las señales que más me impresionó después, porque en su principio no entendía nada, era que me vinieron dos imágenes de dos árboles.
El día que fuimos a Salcadena fue muy muy profundo todo lo que Es difícil de explicar en palabras.
Mágico desde el primer momento. Lo primero que vi fue el árbol que vi en mi visión de la semana anterior. Y bueno, se me salían las lágrimas porque no podía creer que ese árbol se me había presentado o me había salido una imagen de ese árbol.
Así que así empezó mi camino en Salcadena.
y ya cuando ya entramos a la montaña ya se sentía la magia, ya una energía diferente.
Lo siguiente que me marcó mucho fue cuando llegamos, hicimos nuestra primera parada dentro de la montaña y paramos en otro árbol que era el segundo árbol que tuve en mi visión.
Abracé esos dos hermosos troncos Ahí mismo me sentía niña otra vez.
Allí entendí para qué había ido, o uno de los motivos por los que había ido yo a Salcadena. Ese árbol maestro me enseñó, un árbol maestro, me enseñó esa parte de mí que tenía que curar.
Lo que me enseñó fue nadie, ningún psicólogo, ninguna terapia podría haber hecho lo que hizo.
Ahí tuve una reconciliación de las dos energías, la masculina y la femenina, de un dolor que venía de la niñez, un dolor que tenía con mi padre, de no sentirme querida, de sentirme abandonada, de que no me entendiera.
Y después el lado femenino, que yo pensé que estaba bastante curado, también había un desequilibrio y al abrazar, era como esa desesperación, necesidad de sentirme apoyada y eso fue lo que me mostró el árbol qué manera más maravillosa e impresionante de demostrarlo y bueno ahí fue muy emotivo para mí muy emotivo muy personal muy emotivo pero es maravilloso y que ese árbol se me haya presentado una semana antes es increíble el tercer evento que me que me marcó dentro de esa cadena fue ya llegando al final donde están esas rocas como una cueva un lugar sagrado, desde luego un lugar sagrado cuando recibí esas hermosas gotas de esa gruta en mi frente ese momento fue muy evidente que que había algo allí que nos acompañaba, algo hermoso además, algo muy muy muy fuerte inmediatamente sentí que debajo de la rodilla sentía como que unas manos me tocaban y me ayudaban a sostenerme mejor digamos escuche te sostenemos inmediatamente sentí como un calor en toda la zona de mi cabeza era un calor como de fuego era muy muy…
además muy focalizado estaba en mi parte de la cabeza y el corazón sentí como que tenía cerca esa presencia que me decía te sostenemos curiosamente todo fue del lado izquierdo y del lado derecho supe inmediatamente que era un mensaje a tu puedes sostenerte desde el lado derecho que es tu rodilla que está mal ya no está mal ya confía en ella y curiosamente ahora mismo bebí bien a la cabeza y no lo había pensado que es el lado derecho es la parte que representaba la energía masculina de aquel árbol que abrace y se me ponen los pelos de punta porque no había caído en cuenta en eso.
Quiere decir que también puedo sostenerme mi parte masculina.
¡Ay, qué maravilla!
¡Qué hermoso, qué hermoso! No puede ser más perfecto.
Más perfecto no puede ser.
Y ahí salió la niña interior otra vez que se había sentido sola toda su vida, abandonada. Ya no me sentía más sola.
siempre he estado muy acompañada, muy amada, muy amada y Sal Cadena me lo mostró y es el mensaje que me queda estoy muy acompañada y ahí curé mi niña interior ahí la curé precioso es que no puedo ni No tengo palabras, ahora mismo estoy muy emocionada, muy emocionada con esto.
Muy agradecida de…
Muy agradecida de sentirme tan amada, tan amada.
Bueno, ¿y qué ha sucedido después de visitar Sal Cadena? ¿Qué ha sido de mi vida?
Tengo que decir que nunca se va a ir de mi Sal Cadena.
Algo pasó allí que…
que va a ser para siempre me ha abierto la visión y estoy mucho más conectada con la naturaleza así que que hay misterio y todavía no puedo no lo puedo explicar en palabras pero sí que se ha abierto algo que bueno iremos viendo pero estoy muy agradecida y muy agradecida de que Luis haya sido además nuestro guía porque porque vamos ha sido precioso lo que nos ha mostrado allí Nos hemos sorprendido, ni siquiera ha sobrepasado las expectativas, realmente.
[00:28:59] Speaker A: La confianza.
[00:29:01] Speaker C: En la vida, en mí.
[00:29:03] Speaker A: Y en mi corazón. Y eso es que no tiene precios.
[00:29:07] Speaker C: Y me siento sostenida y sé que no voy a tener ningún problema. Es este sentimiento de paz con la vida misma, eso es.
[00:29:18] Speaker D: Gracias, gracias, gracias por la propuesta.
Muy recomendable.
Un abrazo muy grande.
[00:29:29] Speaker E: Una experiencia a otro nivel. Algo que no se puede explicar, que hay que experimentarlo, que hay que vivirlo.
[00:29:38] Speaker F: Siempre he estado muy acompañada, muy amada, muy amada y Sal Cadena me lo mostró.
[00:29:50] Speaker G: Bueno, pues hasta aquí los testimonios de todas estas maravillosas personas. Yo cuando los vuelvo a escuchar me da la sensación que la montaña está hablando a través de ellas.
Gracias, gracias, gracias por estos testimonios tan bonitos.
Y eso es todo por hoy. Espero volver a contar contigo en el próximo episodio de la cabaña del bosque.
Muchas gracias por tu atención.
Un fuerte abrazo y hasta pronto.